Mindfulness y sabiduría

Sobre el concepto de sabiduría

Aunque todos sepamos más o menos lo que es la sabiduría y reconocer cuando estamos ante una persona sabia, lo cierto es que “sabiduría” es un concepto abstracto. Cuanto más intentamos acercarnos a la definición de lo que es sabiduría más se nos escapa, y es que existen saberes religiosos, científicos, populares, prácticos, naturales, etc. 

Según la corriente psicológica la sabiduría es un rasgo que se adquiere mediante la experiencia y, cuando se aplica a asuntos prácticos, la palabra sabiduría es sinónimo de prudencia. Muy ligada a la idea de la sabiduría cristiana, donde la prudencia era una de las 4 virtudes del catolicismo.

Desde una perspectiva más filosófica Aristóteles define la sabiduría como la comprensión de por qué las cosas son de una determinada manera (causalidad), es decir, no saber que una cosa es como es, sino saber por qué es así. Llegar al fondo del por qué de esa cosa. Por otro lado, desde la filosofía de Sócrates, el reconocimiento de la propia ignorancia (“Solo se que no se nada”) también es considerada una forma de sabiduría. 

En la tradición Inuit uno de los objetivos de la enseñanza era desarrollar la sabiduría, que se definía como la capacidad de ver lo que hay que hacer y hacerlo con éxito sin que nadie le dijera lo que tenía que hacer. 

Como podemos ver lo que se entiende por “sabiduría” tiene distintas interpretaciones y matices dependiendo de nuestra línea de pensamiento, de la época o de la cultura, pero todas tienen ciertos puntos en común, el Dr. Ronald D. Siegel hace una aproximación al concepto defendiendo que existen 3 aspectos que toda persona sabia debe poseer. Te lo contamos a continuación. 

La sabiduría consiste en diez partes: nueve partes de SILENCIO y una parte de pocas palabras

Buda

Características de una persona sabia

Según el doctor Ronald D. Siegel existen 3 aspectos que una persona sabia debe poseer: 

1) Perspectiva. Es necesario poder ver las cosas desde distintos puntos de vista para así llegar a un mayor grado de comprensión. Recordemos que incluso la sabiduría en sí es un concepto tan amplio que hay que tener en cuenta las distintas definiciones para una mayor comprensión. Por ello es que hay que intentar entender las cosas no solo desde la perspectiva propia. Entender esto es una de las características fundamentales de sabiduría.

2) Consecuencias. Es necesario vivir la vida sabiendo que todas nuestras acciones van a tener una u otra consecuencia. Hay que tener esto presente como una “guía de comportamiento” ya que de esta forma iremos con más cuidado y seremos más conscientes de nuestras propias acciones. 

3) Tolerar el dolor. Es necesario poder lidiar con el dolor y el malestar ya que muchas veces las cosas importantes no se sienten bien. Generalmente en el proceso de hacer lo correcto tengamos que dejar ir ciertas cosas, permitir o tolerar cosas que no sean cómodas de asimilar. Se enlaza con un concepto básico del mindfulness, la compasión. La compasión consiste en identificar un dolor o un malestar y querer hacer algo para solucionarlo. Generalmente relacionamos la compasión con los demás, pero el mindfulness nos enseña a desarrollar la compasión hacia uno mismo. Esto Es esencial a la hora de poder aceptar todos los cambios, fallos o situaciones difíciles a las que nos iremos enfrentando a medida que tengamos que tomar decisiones a la hora de hacer lo correcto.

Mindfulness y sabiduría

El mindfulness nos puede ayudar a desarrollar la sabiduría ya que desarrolla una perspectiva metacognitiva. Uno de los aspectos básicos del mindfulness, o atención plena, es centrarnos en el presente, en qué sentimos, y en qué pensamos. Pensar en lo que pensamos nos ayuda a distinguir precisamente eso, cuales de ellos son simplemente pensamientos que están en nuestra cabeza y cuales vienen de estímulos externos. Saber esto nos proporciona una gran capacidad de perspectiva. 

Meditar también nos ayuda a comprender muchas de nuestras sensaciones que vienen del cambio. El mindfulness nos ayuda a entender que no hay nada fijo, que todo esta en continuo cambio y nos ayuda a comprender como esto nos afecta en nuestra vida cotidiana ya que nos ayuda a escucharnos, a entendernos y en definitiva a tolerar el dolor. 

La concentración plena también nos ayuda a tener una perspectiva transpersonal, nos da la capacidad de entender que todo y todos estamos relacionados. Lo bueno para mí puede ser bueno para otra persona y viceversa ya que todos somos parte del mismo sistema universal. Esto también nos ayuda a tener una perspectiva más real de lo que nos rodea y así adquirir un poco  más de perspectiva. 

Por último, Siegel vuelve a hacer hincapié en el concepto de COMPASIÓN, y es que la compasión es un concepto necesario a la hora de hablar de sabiduría ya que por ella aprendemos a aceptar el dolor, pero no se queda ahí, sino que la compasión consiste en la acción, a identificar el dolor y hacer algo al respecto. Nos da la fortaleza para mirar a los problemas a la cara y poder enfrentarnos a ellos. 

El concepto de compasión es totalmente imprescindible para desarrollar sabiduría. Si te interesa y quieres saber más hemos desarrollado un taller On-Line con el Dr. Siegel el 18 de mayo en el cual explorará con mayor profundidad los conceptos de compasión y perdón.

A continuación te dejamos el enlace al taller para que veas todos los detalles



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